Descongelación
Cuando la elaboración comienza con perniles congelados, la cuestión principal es alterar lo menos posible las características organolépticas y el aspecto de la materia prima. Al mismo tiempo, es importante evitar condiciones que favorecen la proliferación de la flora bacteriana. El sistema de descongelación deFrigomeccanica utiliza la transferencia de calor de doble acción: calor sensible transmitido del aire al producto y calor latente transferido gracias a la condensación de la humedad del aire. El calor se transfiere muy rápidamente, de manera muy eficaz en términos de costes, y sin alterar la estructura y las características organolépticas del producto congelado.
Si se compara con otros sistemas (descongelación natural, vapor de agua, baño en agua o microondas), la tecnología de descongelación de propiedad de
Frigomeccanica demuestra ser la más eficaz, la más eficiente en términos de consumo energético (agua caliente, electricidad y agua de humidificación), con el mejor rendimiento tanto por lo que se refiere a la merma de peso como al aspecto del producto, y la más sostenible, sin necesidad de generar vapor de agua y con volúmenes mínimos de agua contaminada por tratar.
Basándose en su experiencia de cinco décadas a nivel mundial, Frigomeccanica ha puesto a disposición del mercado global su saber hacer sobre la distribución del aire en el diseño y suministro de sistemas de descongelación con una capacidad de carga de 10.000 -50.000 kg, para todos los tipos de carne (buey, oveja, aves de corral, cerdo), y en distintas formas (bloques, cuartos o mitades de buey, perniles frescos), independientemente del sistema de colgado utilizado (carriles o bastidores en el suelo).
El sistema de descongelación de Frigomeccanica presenta las siguientes ventajas:
- Al final de la descongelación, producto con características equivalentes al producto fresco
- Merma de peso del producto sumamente reducida con limitada pérdida de proteínas
- Mantenimiento del color original
- Temperatura controlada en la superficie y en el centro del producto para reducir al mínimo las cargas bacterianas
- Tiempos breves de descongelación con bajos costes energéticos y bajísimo consumo de agua.
El proceso es gestionado automáticamente, monitorizando dos parámetros con sólo dos sondas que detectan:
- Temperatura superficial. Una vez alcanzada la temperatura del valor planteado (por ej. 5°C), la temperatura ambiente desciende gradualmente, mientras continúa la humidificación.
- Temperatura en el núcleo. Una vez alcanzada la temperatura del valor planteado (por ej.: 0°C), el calentamiento y la humidificación son desactivados. Sucesivamente, puede intervenir un sistema frigorífico para el mantenimiento de la temperatura de fin de proceso.
La sección frigorífica puede utilizar expansión directa de gas frigorígeno o agua helada (aditivada con glicol).
Las distintas fases del proceso de curación son controladas por un microprocesador programable que garantiza la implementación de ciclos personalizados en función de las características del producto.